Por VozEs
Melody Shanahan desde chiquita trae algo innato: el baile. Cuenta su mamá que desde sus primeros años ya bailaba cumbias, hacia juegos de bailar y escuchaba la música tradicional mexicana.
A sus dieciséis años, esta chica de origen mexicano e irlandés, nacida en los Estados Unidos, ha sido aceptada en Butler University, en donde va a completar su formación como bailarina. El orgullo la desborda a ella y a su familia y lo comparten con VozEs y sus lectores en una entrevista en la que la bailarina nos cuenta sobre su relación con la danza y ese viaje que la ha llevado hasta donde se encuentra ahora.

¿Cómo es esa relación que tienes con la danza?
La Danza/Ballet es mi vida, lo hago desde los 6 años. Es donde tengo amigos, mentores, vida social, es mi segundo hogar; es mi pasión y mi forma de comunicación desde que tengo memoria, me expreso mejor bailando que con palabras. La danza es mi carrera, a través de la danza he ganado premios, becas y he sido reconocida por asociaciones culturales y sin fines de lucro en Carolina del Norte.
¿Cómo se manifiesta tu identidad en tu vida y tu arte?
Me identifico como mujer, latina y bailarina en formación, retrato mi arte en forma de danza, creando nuevas coreografías a partir de mi formación de ballet y mis Raíces Mexicanas.
Está en mi ADN. Abrazo mis raíces tan profundamente. Mi mamá nació y se crió en México y me enseñó a amar la comida, los colores, la música y las tradiciones. Todo eso influyó en mi Danza desde que era niña, exactamente tenía 10 años cuando comencé a participar en festivales internacionales bailando ballet con música latina
Más recientemente, hace dos años, comencé a tomar clases de folklore mexicano y desde hace un año he estado actuando y colaborando con grupos de folklore en Greensboro NC.
Bailando «La Danza del Venado», Veracruz, Jalisco, Azteca en Fiestas.
También brindándome la oportunidad de fusionar estilos entre el ballet clásico y el folklore mexicano.


«Desde que estaba mezclando esos géneros, yo quería mostrar mi cultura a través de mi arte, pensé que sería una gran oportunidad, esto también incluye a los grupos con los que he estado actuando, ellos también son parte de esta experiencia, ayudan mucho, a todos los artistas con los que trabajo, los aprecio y los recuerdo, para lograrlo se necesita práctica y motivación, lo tenemos».
¿Cuál consideras como tu mayor éxito hasta la fecha y a tu corta edad?
Ser un bailarín independiente a mi edad y tener la oportunidad de realizar mis propias coreografías en teatros alrededor de Charlotte, Greensboro y Raleigh, siempre bailando ballet con sonidos latinos/hispanos/mexicanos para otras audiencias no hispanas.
¿En dónde te ves dentro de 10 años?
Me veo convirtiéndome en bailarina principal de ballet en una gran compañía y bailando alrededor del mundo, con mi título en Artes Escénicas.
Más adelante quiero tener mi propia academia donde pueda dar clases de ballet y folklore mexicano.
¿Cuáles son tus bailarines favoritos?
Tengo que decir que soy yo, soy mi bailarina favorita, pero las bailarinas que tienen una gran influencia en mí y admiro desde que era una niña son Misty Copeland y Elisa Carrillo.
¿Y tus piezas para bailar?
Yo era el hada de la bomba de azúcar en el Cascanueces de mi academia, una de mis variaciones favoritas de la danza, así como Giselle, una variación de Kitri en el ballet clásico.
Mi propia creación será mi última Juana Gallo, un soldado de la Revolución Mexicana, una pieza de Ballet Clásico/Folklore recientemente presentada en el Cary Art Center en Raleigh NC y Chacarrera del violín una mezcla de Veracruz, México con Classical Ballet, realizado en el Knight Theatre aquí en Charlotte, Cary Arts Center en Raleigh, y el Vandyke Theatre en Greensboro.


¿Cómo te las arreglas para ir a la escuela y bailar?
Decidí hacer el bachillerato en línea en el 2020 debido a que quiero dedicarle más tiempo a mi formación en ballet clásico y folklore mexicano.
Tengo clases de ballet cinco días a la semana por las tardes, también estoy en el programa de «estudio-trabajo» en la academia de baile a la que asisto, donde ayudo al profesor de baile dos días a la semana (para ayudar un poco a mis padres con el costo de la colegiatura).
También tomo una clase de Folklore Mexicano todos los viernes vía zoom con una maestra de México, mi papá convirtió mi garaje en un estudio de baile para que yo también pueda practicar mis futuras actuaciones como bailarina independiente en casa.
También me da tiempo para entrenar una vez al mes con un grupo de Folklore Mexicano en Greensboro.
No es fácil pero es lo que me hace feliz y es un gran camino para mi futuro.
¿Qué te gustaría que hicieran los jóvenes, que sientan o sepan cuando te ven bailar?
Como joven latina, no veo mucha diversidad en el mundo del ballet, el ballet clásico también está al alcance de los latinos.
Cuando bailo en festivales culturales muchas veces trato de mandar un mensaje como el último que interpreté, «Sin Miedo» una canción contra los feminicidios o «La migración es bella».
En última instancia, mi objetivo ha sido llegar a los corazones, romper las fronteras culturales y crear un puente para que los jóvenes latinos sepan que todo es posible sin importar el color de nuestra piel, acentos o antecedentes.
Sólo tenemos que quererlo y trabajar para ello.
Quiero que los jóvenes como yo establezcan y creen metas en cualquier forma, crear disciplina nos brinda una mejor oportunidad de ir a la universidad, obtener mejores calificaciones y tener un mejor futuro.

