Por Elvira Jardines
Traes en tus ojos la luz que de repente irrumpe en mi habitar sombrío
Como una enorme estrella caes en cada uno de mis oscuros rincones
Haces que mis cenizos brazos se alarguen al laborioso día y resplandezcan
Que mis entumecidos pies se desperecen y convierta en camino
La intransitable ruta de mi vida
Que mi empolvado corazón lleno de telarañas vuelva a latir de prisa
Y salga a la batalla, dispuesto incluso a que una flecha lo atraviese
Y lo traiga a la vida
Y el hollín que cerraba mis poros se evapore en forma de azahares
Y perfume mi piel de luz de luna
Haces que mi lenguaje amargo se haga miel en mi lengua
Y que mis palabras se transformen en poesía